Enterrado en un jardín, maniatado y con la mitad del cuerpo envuelto en un costal de rafia, fue encontrado el cadáver de Guillermo C. M (16), menor reportado como desaparecido a fines de julio y que habría encontrado la muerte tras una reunión con amigos.
El ingeniero de sistemas Ronald Herrera Sarapura (41), fue capturado ayer tras ser identificado como el presunto responsable de la desaparición y muerte del menor. En su poder, se halló la polera de Guillermo, la cual tiene restos de vomito y será clave en la investigación.

Los hechos. Guillermo, salió de su casa el pasado 28 de julio, en compañía de su amigo Bryan Orbezo Mendoza (18) y se dirigieron a la casa de Ronal Herrera Sarapura de 41 años, ubicada en el Psj. Salesiano #189, Urb. Aprovi de El Tambo.

En el interior de dicho inmueble participaron de una reunión basada en el consumo de alcohol y que fue abandonada más tarde por Bryan Orbezo Mendoza, quien dejó solos a los protagonistas de este macabro hecho.
Según la confesión de Ronald Herrera Sarapura, tras estar bebiendo con el adolescente, este se habría asfixiado con su propio vomito luego de beber tequila, falleciendo de forma repentina.
Así mismo, se supo que minutos antes del incidente, Guillermo y Ronald Herrera Sarapura, habrían mantenido relaciones sexuales; información que también será incluida dentro del proceso de investigación.
Lo enterró. En su confesión, Herrera Sarapura también señaló que, desesperado por no saber que hacer con el cuerpo, mantuvo al cadáver hasta por 5 días debajo de su cama y tras el periodo, lo enterró en el jardín delantero de la vivienda donde sucedió el hecho.
Tras llegar a la vivienda, la Policía Nacional del Perú y el Ministerio Público, realizaron las diligencias para desenterrar el cadáver, al cuál hallaron en estado de descomposición, maniatado con un cable de internet y envuelto en un costal de rafia; siendo trasladado a la morgue judicial para la necropsia de ley que determinará las verdaderas causas de su muerte.

Piden justicia. A las diligencias también llegaron los familiares del adolescente, quienes presos de la impotencia solo atinaron a pedir justicia para su hermano y la inclusión de Bryan Orbezo Mendoza en el proceso de investigación.