En agosto, la destacada escultora huancaína Claudia María Calderón Dianderas se embarcará en una emocionante expedición artístico-científica en el Ártico. Esta expedición se llevará a cabo en el archipiélago de Svalbard, en el barco que navega por las gélidas aguas del archipiélago y reúne a científicos, artistas y periodistas de todo el mundo.
Calderón Dianderas ha sido seleccionada para formar parte de este exclusivo grupo de profesionales debido a su destacado trabajo en el campo de las artes visuales. Con proyectos que van desde la creación de libros hasta colaboraciones internacionales, Claudia ha demostrado su pasión por explorar diferentes formas de expresión artística en todo el mundo.
Con una base en Italia, Claudia ha llevado su arte a nuevas alturas, participando en proyectos internacionales y compartiendo su experiencia en conferencias en universidades de renombre, como la Universidad Vassar de Nueva York.
Esta será la segunda vez que Claudia participe en el proyecto «The Arctic Circle», que busca generar iniciativas ambientalistas a través de la colaboración entre artistas, científicos y educadores en el Ártico. Con talleres y laboratorios a bordo del barco, los participantes tendrán la oportunidad de trabajar en proyectos ambientales directamente en el lugar, aprovechando al máximo su estancia en esta región única del mundo.
La participación de Claudia en esta expedición es especialmente notable, ya que solo ha habido cuatro latinoamericanos en el proyecto en el pasado, y ella es la única peruana seleccionada hasta el momento. Su presencia resalta la importancia de la representación latinoamericana en iniciativas internacionales de este tipo.
La expedición comenzará el 15 de agosto y durará dos semanas, durante las cuales Claudia y los demás participantes tendrán la oportunidad de explorar, investigar y colaborar en proyectos que tendrán un impacto duradero en el medio ambiente y en la comunidad artística global.
El programa «The Arctic Circle» ha sido fundamental en la creación de redes y en la generación de futuros proyectos de carácter artístico-ambiental. La calidad de los profesionales involucrados, tanto en el arte como en la ciencia y la arquitectura, es evidente y promete resultados significativos en la lucha por la conservación ambiental.