Nuestra región se llena de vida y color al celebrar el Festival de la Tunantada, reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación desde 2011. Esta emblemática festividad no solo fortalece el sentido de identidad y comunidad, sino que también desempeña un papel crucial en el impulso de la economía local al atraer a miles de visitantes. Según la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo de Junín, durante 2024, el evento congregó a más de 60,000 turistas, tanto nacionales como internacionales, consolidándose como un importante motor para la economía y promoción cultural.
“Es fundamental garantizar una experiencia placentera y segura para los visitantes. El turismo no solo actúa como un motor de generación de empleo, sino que también contribuye significativamente a mejorar los ingresos de las familias locales y a dinamizar la economía regional. Además, una oferta turística bien estructurada y sostenible puede posicionar a Junín como un destino competitivo a nivel nacional e internacional, potenciando el impacto económico y social a largo plazo”, señaló el economista de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES), Dittmer Quispe.
El especialista destacó que un incremento en la afluencia de turistas impulsa una mayor demanda de servicios como hospedaje, tours y alimentación. Esto, a su vez, motiva a empresas como agencias de viajes y restaurantes a contratar más personal para satisfacer las necesidades de los visitantes. Este dinamismo no solo beneficia a los negocios, sino que también se traduce en mayores ingresos para las familias de la región, fortaleciendo la economía local de manera significativa.
¿Ya se recuperó el flujo de visitantes en Junín?
Entre enero y octubre de 2024, el aeropuerto Francisco Carlé–ubicado en la provincia de Jauja– recibió a 174 mil pasajeros. Este dato es menor en 35% y 12% a lo registrado en 2023 y 2022, respectivamente. Además, esta cifra se encuentra por debajo de lo alcanzado antes de la pandemia. Recordemos que el aeropuerto permaneció cerrado desde noviembre del 2024 a enero 2025, debido a trabajos de mantenimiento en la pista de aterrizaje. Es decir, el aeropuerto más grande de la región no ha recibido pasajeros durante tres meses debido a su mala infraestructura.
“Además de la preocupante situación de la infraestructura aeroportuaria, es crucial abordar el estado de la Carretera Central, la principal vía de acceso a la región desde la capital. Esta carretera ha superado ampliamente su capacidad de tráfico original, diseñada para solo 4,000 vehículos diarios. A ello se suma el deterioro y la insuficiencia de las vías alternas, que carecen de condiciones adecuadas para permitir el tránsito seguro y eficiente de vehículos y buses en ambos sentidos. Esta situación limita significativamente el desarrollo y la conectividad de la región”, enfatizó Quispe.
Infraestructura vial, profesionalización y seguridad: próximos pasos
Para revitalizar el turismo en la región central, el experto destacó tres aspectos importantes que requieren fortalecimiento: la infraestructura turística, la lucha contra la inseguridad ciudadana y la profesionalización del sector. Mejorar el acceso a los destinos turísticos no solo optimiza la experiencia de los visitantes, sino que también incrementa su satisfacción. Del mismo modo, garantizar condiciones de seguridad adecuadas refuerza la percepción de calidad en los servicios ofrecidos, consolidando a la región como un destino atractivo y confiable.
“Además de estos aspectos, es importante considerar que una gran parte de las empresas en el sector turístico son de carácter familiar y carecen de herramientas de gestión empresarial. La implementación de estrategias y sistemas administrativos más sofisticados podría optimizar la eficiencia operativa y mejorar significativamente la calidad del servicio ofrecido. Esto, a su vez, fortalecería su competitividad en un mercado cada vez más exigente y dinámico”, concluyó el especialista.